Una sensación de inseguridad que produce que todo el sistema esté en alerta.
Un sin parar de pensar qué ocurrirá.
Todo porque hay algo que nos perturba, algo que nos inquieta, algo que queremos superar pero en realidad nos supera a nosotros.
Esto no ocurriría si tuvieramos la suficiente fuerza de voluntad y nos enfrentaramos a ellos.
No todos somos fuertes para poder hacerlo. Algunos parecen ser débiles y por dentro ser de acero, otros son débiles por fuera y por dentro a la vez, otros son fuertes por fuera y por dentro también y otros son de acero por fuera y como esponja por dentro.
Esto nos priva a muchos de poder seguir adelante sin miedos, nos priva de poder hacer lo que queremos, nos priva de poder decir lo que sentimos, nos priva de tomar decisiones que quizá luego hubieran sido las mejores...
Miedo no es otra cosa que algo que nos creamos nosotros mismos. Algo que nos inquieta tanto que se convierte en miedo.
Superar el miedo es tan simple como armarte de valor y superar la prueba que se te antepone.
Miedo es lo que siento cuando cierro los ojos para sumergirme en mi inconsciente.
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