Una leve conversación de a penas 3 paradas de metro fue nuestro encuentro.
Dos años más tarde empezamos a compartir tardes de pipas, skate y salidas a Plaza Cataluña. Pasaron los días y aparecieron las conversaciones estúpidas por mesenger, los piques en persona (idiota/bonita), las perdidas entre aburrimiento...
Pero el 28 de Junio decidimos decirnos que nos echaríamos de menos, y un beso selló nuestros sentimientos.
A partir de allí empezamos a abrir nuestro corazón, a mostrarnos tal y cómo éramos, a darle al otro el poder de destrucción. Dimos la oportunidad de establecer amistad con los demás, dimos la oportunidad de hacer vida independiente, dimos la oportunidad de ser pareja, dimos la oportunidad de mostrarnos ante el otro. Crecimos juntos entre buenos y malos ratos. Crecimos con momentos de felicidad extrema y momentos de broncas insoportables. Pero llegó el momento en que tuvimos que escoger caminos distintos y decirnos "hasta luego".
Dos situaciones completamente opuestas fueron escogidas por cada uno: necesito hablar para poder seguir y que no hable no significa que no sufra.
Pasado el tiempo yo intenté rehacer mi vida al igual que tú. Otra persona intentó ocupar mi corazón, pero no pasó de una bonita amistad; otra persona intentó mediante el juego hacerse conmigo; otra persona me hacía de apoyo mostrándome su lado más bonito y maestro. Pero tu, no te arreglabas cuando salías en busca de amor hasta ese momento. Después de los días yo me dí cuenta de que no podía seguir así y tu te diste cuenta de que tampoco.
Dos conversaciones en este periodo ayudaron a que la sinceridad apareciera entre los dos. Tu pudiste decir aquello que jamás habías dicho y yo pude decirte aquello que llebaba guardado desde hacía tanto tiempo. Desaparecer era una de tus opciones pero al final me hiciste caso.
3 palabras "Anything for you" repetidas 3 veces en menos de 2 semanas. No pedir nada porque se daría todo.
Después de 3 años han cambiado muchas cosas pero hay una que espero que nunca, repito nunca, cambie... la amistad. Y sólo por esa razón no diré aquello que quieres escuchar porque te emocionarías.
Una mirada, una sonrisa, un abrazo... nuestra amistad.
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Dos años más tarde empezamos a compartir tardes de pipas, skate y salidas a Plaza Cataluña. Pasaron los días y aparecieron las conversaciones estúpidas por mesenger, los piques en persona (idiota/bonita), las perdidas entre aburrimiento...
Pero el 28 de Junio decidimos decirnos que nos echaríamos de menos, y un beso selló nuestros sentimientos.
A partir de allí empezamos a abrir nuestro corazón, a mostrarnos tal y cómo éramos, a darle al otro el poder de destrucción. Dimos la oportunidad de establecer amistad con los demás, dimos la oportunidad de hacer vida independiente, dimos la oportunidad de ser pareja, dimos la oportunidad de mostrarnos ante el otro. Crecimos juntos entre buenos y malos ratos. Crecimos con momentos de felicidad extrema y momentos de broncas insoportables. Pero llegó el momento en que tuvimos que escoger caminos distintos y decirnos "hasta luego".
Dos situaciones completamente opuestas fueron escogidas por cada uno: necesito hablar para poder seguir y que no hable no significa que no sufra.
Pasado el tiempo yo intenté rehacer mi vida al igual que tú. Otra persona intentó ocupar mi corazón, pero no pasó de una bonita amistad; otra persona intentó mediante el juego hacerse conmigo; otra persona me hacía de apoyo mostrándome su lado más bonito y maestro. Pero tu, no te arreglabas cuando salías en busca de amor hasta ese momento. Después de los días yo me dí cuenta de que no podía seguir así y tu te diste cuenta de que tampoco.
Dos conversaciones en este periodo ayudaron a que la sinceridad apareciera entre los dos. Tu pudiste decir aquello que jamás habías dicho y yo pude decirte aquello que llebaba guardado desde hacía tanto tiempo. Desaparecer era una de tus opciones pero al final me hiciste caso.
3 palabras "Anything for you" repetidas 3 veces en menos de 2 semanas. No pedir nada porque se daría todo.
Después de 3 años han cambiado muchas cosas pero hay una que espero que nunca, repito nunca, cambie... la amistad. Y sólo por esa razón no diré aquello que quieres escuchar porque te emocionarías.
Una mirada, una sonrisa, un abrazo... nuestra amistad.
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